Arte y belleza como terapia.
Pintura, escultura, poesia, musica, cierto teatro y ciertas películas pueden tener un interessante poder terapeutico, la belleza siempre tiene un poderoso poder terapeutico. Que en fin empieza a ser considerado en el ambito medico.
Como lo explicó recientemente la Dra. Hélène Boyer, vicepresidenta de los doctores francófonos de Canadá, «hay cada vez más evidencia científica que demuestra que la terapia artística es buena para la salud «. El nivel de cortisol y serotonina aumentan. Parece que una visita al museo permite la secreción de hormonas responsables de nuestro bienestar y estos beneficios se encontrarían no solo a nivel psicológico sino también a nivel físico. De ahí el acuerdo establecido entre el Museo de Bellas Artes de Montreal y la asociación de médicos francófonos, según el cual, los médicos que participan en el proyecto pueden prescribir 50 visitas gratuitas al museo para quienes padecen psicopatologías, trastornos de la alimentación, hipertensión arterial y diabetes.
Sin embargo, la iniciativa no es del todo nueva. De hecho, durante aproximadamente una década, en los EE. UU., el National Endowment for the Arts ha trabajado con varios profesionales de la salud precisamente para promover la cultura como una forma de terapia, reconocida de hecho también por muchos hospitales.
Se necesitaron las técnicas de neuroimagen más sofisticadas para desentrañar el mecanismo mediante el cual la «droga» de la cultura actúa en nuestro cerebro. «Las neuronas específicas de la corteza orbitofrontal se iluminan», explica el Dr. Peter Grossi: «Una vez activado, este centro cerebral de belleza produce moléculas señal como las endorfinas, que dan felicidad, la dopamina, que causa placer, y la oxitocina, la hormona del amor. Estos neurotransmisores actúan en los centros más ancestrales de nuestro cerebro, aquellos que regulan funciones vitales como la respiración y la frecuencia cardíaca, reduciendo el estrés y el riesgo cardiovascular. Además, a través de la red linfática que conecta el cerebro con el sistema inmunológico, la cultura también refuerza las defensas contra amenazas externas, como virus y bacterias, pero también internas, como tumores y enfermedades degenerativas «.
En resumen, la cultura y la belleza podrían hacer milagros, algo que llevo afirmado y practicando desde muchos año.