¿Vacunas? No gracias.
“Las vacunas son la espina dorsal de toda la industria farmacéutica. Los niños vacunados se vuelven clientes de por vida”.
Doctora Sherry Tenpenny
( una de las mas preparadas y honestas investigadora sobre el impacto de las vacunas sobre la salud)
Los problemas acababan de comenzar para la vacuna destinada a salvar al mundo de la “pandemia”. Thomas Clark, un epidemiólogo de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU, ha presentado datos sobre las miles de personas que recibieron la muy publicitada vacuna Covid-19 de Pfizer (un bando de criminales) informando sobre «eventos de impacto en la salud». Entre los primeros 215,362 estadounidenses que se arremangaron para recibir la inyección, 5,052 desarrollaron efectos adversos definidos como «incapacidad para realizar las actividades diarias normales, incapacidad para trabajar, que requirió atención médica”. Eso equivale a un 2,3 por ciento de las inyecciones, o una de cada 43 personas que experimentan un impacto significativo en la salud a corto plazo. Lo que pasará a largo plazo lo verán los vacunados,
Las autoridades sanitarias del Reino Unido informaron de dos reacciones de choque anafiláctico graves que requirieron tratamiento médico de emergencia entre los primeros 5.000 empleados del hospital vacunados en Inglaterra. Los síntomas de la anafilaxia incluyen urticaria repentina, sibilancias, hinchazón de la garganta, náuseas, confusión, ansiedad y caída de la presión arterial que puede provocar un colapso vascular. Puede resultar fatal.
En unos días, llegaron dos informes más de shock por la vacuna Covid en trabajadores de la salud de un solo hospital en Juneau, Alaska. Luego, las reacciones de cuatro empleados en un hospital de Chicago hicieron que suspendiera temporalmente las inyecciones. Los CDC informaron seis respuestas anafilácticas graves al final de la semana.
Eran los primeros días del lanzamiento, pero la imagen de la vacuna COVID ya se veía menos optimista que la que las agencias de salud y los medios de comunicación habían estado proclamando durante meses. Las reacciones alérgicas graves son “una en un millón”, dijo con confianza el supervisor gubernamental Paul Offit del Comité Asesor de Vacunas y Productos Biológicos Relacionados de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) en la semana previa al lanzamiento. ¿Nada de que preocuparse? ?¿El 2,3 por ciento no es preocupante? ¿Y se te toca ti?
Hablaremos de nuevo de esto cuando será posible saber el numero de personas que ha perdido la vida por ser vacunadas.
Se habla muy poco o nada de de lo que ha pasado con la vacunas antes de de esta “pandemia”, Se habla poco a nada del juicio en contra del super-criminal Bill Gates que se está teniendo en un tribunal indio por el daño irreversible de miles de niños consecuencia de las vacunas “donadas” por este psicopático “filantropo”.
Casi 126.000 personas han compartido sus desgarradoras historias de lesiones y muertes por vacunas a través del sitio web VAXXED (www.vaxxed.com) y el canal de YouTube. Estas historias de heridas de pesadilla sugieren el potencial de daños más sutiles y fáciles de pasar por alto que las vacunas pueden causar al alterar el sistema inmunológico.
Si las vacunas pueden causar trastornos cerebrales y autoinmunes graves, y muerte ¿qué más pueden hacer?
Consideramos que la libertad de vacunación debe ser un derecho inalienable de todo ser humano y que las autoridades no pueden forzarlas ni siquiera en base a la teoría de la inmunidad de grupo (llamado justamente rebano), teoría que no tiene fundamento científico. Son muchos los casos de daños causados por las vacunas, algunas que han sido retiradas del mercado y otras que siguen administrándose, pese a existir pruebas que deberían llevar a una investigación para su posible retirada. Algunos profesionales honestos que han informado sobre dichos efectos adversos son coaccionados por las corporaciones médicas de carácter gremial, como es el caso de la Dra. Isabel Bellostas que ha sido amenazada de expulsión por Colegio de Médicos de Madrid por informar a los padres de los peligros de la vacunación, en los casos de niños con deficiencias de salud. Lo que pone de manifiesto que la industria de las vacunas es un negocio lucrativo, que además presiona por incorporar más vacunas en el calendario oficial de vacunación y pone en cuestión que la prioridad sea nuestra salud.